Ahora sabes de la soledad y del caer de lluvia de la espera.
Esta noche se abre un pergamino
donde en cada verso yo te nombro y tú me sueñas,
siendo dársena de todas mis mareas
el chasquido del deseo golpea tu cuerpo,
sientes la luz, la sed, el relámpago
y no puedes parar de recorrerte
pensando en mis manos y en mi boca.
f.
Esta noche se abre un pergamino
donde en cada verso yo te nombro y tú me sueñas,
siendo dársena de todas mis mareas
el chasquido del deseo golpea tu cuerpo,
sientes la luz, la sed, el relámpago
y no puedes parar de recorrerte
pensando en mis manos y en mi boca.
f.